Si nos ponemos a imaginar combinaciones posibles pueden salir cosas preciosas, y por supuesto que no hablo solo de ropa...
Dejar el blanco para las flores nos evita un riesgo y siempre es un acierto.
El pistacho y el marrón chocolate, atrevido y acogedor, la combinación perfecta.
La dulzura lleva estos colores, seguro.
Lo silvestre y el 'caos' ordenado quedan genial con esta combinación. Vegetación, naturaleza ordenada.
Muá.
Fuente : www.phoenixbrideandgroom.com/